TABIO En el convento de los Hermanos Menores Capuchinos, el pasado domingo, 3
de noviembre, se llevó a cabo el retiro de los muchachos que se están
preparando para la Confirmación, en nuestra comunidad del noviciado de Bogotá y
que pertenecen a la parroquia de San Pascual Bailón. Cuando salimos de la
ciudad, pusimos nuestra jornada en las manos de Dios, invocamos la luz del Espíritu
Santo y la compañía de la Virgen María.
En el itinerario de formación cristiana, observamos en
los adolescentes una especie de receso en la vida de fe, el hecho de que pasan
de la infancia a la adolescencia, trae consigo también un cambio en el ámbito religioso,
pero es necesario seguirlos acompañando para que lleguen a adquirir una fe
madura.
Con gran responsabilidad las novicias, Karol y Yaqueline,
se dieron a la tarea de preparar este día de retiro, involucrando a los papás,
al párroco y a todas las hermanas de la comunidad.
En el sucederse de los temas: la vida, la oración, el
noviazgo, la familia, la sexualidad etc… se realizaban algunas dinámicas para
mantener un ambiente de interacción. Al centro de la jornada participamos en la
celebración Eucarística.
Poco antes de las 5 de la tarde, iniciamos el viaje de
regreso a Bogotá, con la alegría de haber transcurrido un día intenso de
espiritualidad y entregando al Señor el cumplimiento de la obra iniciada,
porque será él a atraer estos corazones palpitantes de juventud y de deseos de
vivir una fe alegre y de saborear aquella serenidad profunda que nace del
encuentro con El…
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